“Una de las ventajas de los alumnos del máster de Ingeniería Biomédica es que interactúan con la Clínica, el CIMA, y todo el entorno universitario

Julio Maset es director de desarrollo de CINFA y recientemente ha impartido una sesión a los alumnos del máster en Ingeniería Biomédica de Tecnun

20 de diciembre de 2018

Julio Maset es director de desarrollo de CINFA y recientemente ha impartido una sesión a los alumnos del máster en Ingeniería Biomédica de Tecnun.

¿Qué es lo que destacaría del programa Máster de Ingeniería Biomédica de Tecnun?
Yo creo que lo más importante es que por fin tenemos un puente entre dos mundos. Entre el mundo de la ingeniería y el del mundo de la medicina, que tradicionalmente no se habían entendido muy bien. Los alumnos de este máster salen muy bien preparados y son capaces de hacer de dicho puente. Saben que las necesidades que surgen en el mundo de la salud tienen soluciones en el mundo de la ingeniería. 

¿Cree que se producen sinergias valiosas para los alumnos entre Tecnun, la Clínica Universidad de Navarra o el Centro de Ingeniería Biomédica?
Sin ninguna duda. El tener un grado de Ingeniería Biomédica que está aislado de todo lo demás no tendría sentido. Y la ventaja de los alumnos de Tecnun es que interactúan con CIMA, con la Clínica, etc. Y pueden ver si ese proyecto que tienen en mente va a satisfacer una necesidad o no. Asimismo, todo el entorno de la Clínica y de la Universidad puede contar con Tecnun para que les dé servicio.

¿Qué aporta el perfil de nuestros alumnos al mundo empresarial y de investigación?
Quizá lo más importante es que hagan de puente y de detención de necesidades. Hoy en día tenemos una tecnología muy evolucionada pero el mundo de la salud sigue siendo un poco reticente a aceptar soluciones nuevas. La ventaja que tienen estos alumnos es que tienen una mente abierta 360 grados y en el momento en que detectan una necesidad son capaces de buscar una solución. Y además aportan soluciones con pensamientos que no eran habituales en el sector. Por tanto, creo que van a dar solución a muchísimas necesidades que se plantean.

¿De qué les ha hablado a los alumnos?
He querido abrirles la mente sobre cómo es el panorama sanitario. Que entiendan que lo que van a hacer ellos, ya sea en tratamiento de datos o de desarrollo de sistemas, tiene cabida dentro de un mundo que es muy especial, que es el mundo de la salud. En él, el cliente final es el que utiliza la solución, pero no es el prescriptor ni el pagador. Por lo tanto, lo que les he intentado transmitir es que vean la complejidad del mundo sanitario y que entiendan que hay muchos agentes y que tienen que tener en cuenta a todos ellos. 

¿Por qué recomendaría estudiar el Máster en Ingeniería Biomédica?
Si yo volviera atrás, igual estudiaría el grado de Ingeniería Biomédica en lugar de haber estudiado medicina y luego haberme pasado al mundo de los laboratorios. Creo que es un máster de futuro porque es imposible ya mantener la sanidad al margen de las nuevas tecnologías, de la técnica y la ciencia. Yo creo que estamos en una ventana de oportunidad importante. Dentro de 10-20 años pienso que habrá muchas empresas que empezarán a dar soluciones a la salud, pero hoy por hoy todavía estamos en un punto muy incipiente. Además, una empresa pequeña, con empleados como los alumnos de este máster puede tener la misma capacidad que una gran multinacional dando soluciones a un pequeño nicho.