Medicina de precisión para tratar el cáncer: un congreso internacional presenta los últimos avances
Organizado por la Clínica Universidad de Navarra y el MD Anderson Cancer Center de Houston, expondrá las novedades en técnicas de diagnóstico genómico, dianas terapéuticas y fármacos dirigidos hacia la personalización del tratamiento del cáncer, buscando menor toxicidad y mayor eficacia
27 de septiembre de 2016
Minimizar la toxicidad y los efectos secundarios de los tratamientos a la vez que aumentar su eficacia constituyen el principal objetivo de las nuevas terapias contra el cáncer. Hacerlo de forma personalizada buscando los fármacos más adecuados para cada paciente es el fin primordial de la denominada “Medicina de Precisión”. Una modalidad en pleno auge que protagonizará el I International Workshop on Genomic Testing in Cancer, cuya celebración tendrá lugar los próximos 28, 29 y 30 de septiembre en el Centro de Investigación Médica Aplicada, CIMA de la Universidad de Navarra, en Pamplona. El congreso abordará las últimas técnicas para determinar el perfil genómico o molecular tumoral de cada paciente, sus principales dianas terapéuticas y los medicamentos más novedosos que permiten un tratamiento personalizado.
Este primer curso práctico internacional -organizado por la Clínica Universidad de Navarra, por el MD Anderson Cancer Center de Houston, por el Instituto de Investigación Sanitaria de Navarra (IdiSNA), y por el Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA)- dará cita a los mayores expertos en esta medicina dirigida y en él participarán cerca de 200 especialistas de todo el mundo. Entre los ponentes más relevantes figuran científicos de la talla del Dr. Hilario E. Mata, director de los Global Academic Programs del MD Anderson Cancer Center de Houston (Texas, EE.UU.), del Dr. Ignacio Wistuba, patólogo molecular del mismo centro y co-director de este workshop junto al Dr. Ignacio Gil Bazo, director del Departamento de Oncología de la Clínica Universidad de Navarra. La ponencia principal de inauguración del workshop será impartida por el Dr. Rafael Rosell, uno de los oncólogos clínicos y moleculares más prestigiosos y laureados en el ámbito del cáncer de pulmón. También ofrecerá una conferencia el Dr. Joaquim Bellmunt, director del Centro de Cáncer de Vejiga del Dana-Farber Cancer Institute y profesor de la Universidad de Harvard en Boston, Massachussetts (EE.UU).
Avances en medicina personalizada
“Hoy, en Oncología, para hacer una medicina personalizada, de precisión, necesitamos ser capaces de ofrecer a nuestros pacientes un tratamiento dirigido, basado en una diana terapéutica”, advierte el Dr. Ignacio Gil Bazo. De ahí la vocación esencialmente práctica con la que nace el simposio, “debido a esa necesidad que tiene el oncólogo de conocer las técnicas de diagnóstico genómico, las posibles alteraciones genéticas detectables y los principales fármacos dirigidos a una diana concreta de un tipo de tumor”, indica el especialista.
Dianas genéticas y técnicas de detección
El término “diana” se aplica en medicina a una alteración molecular clave, en este caso, en la activación de los tumores, y frente a la que puede dirigirse un determinado tratamiento.
El principal escollo que surge en esta medicina de precisión, advierte el Dr. Gil Bazo con experiencia en este tipo de tratamientos personalizados, “es que las dianas terapéuticas tienen que ser detectables” y, por tanto se hace necesario conocer muy bien las diferentes opciones tecnológicas y las limitaciones técnicas que existen para estudiar estos objetivos claves y sus genes en sus diferentes manifestaciones. Este aspecto resulta clave especialmente en un campo como este, en el que la tecnología está en constante evolución y es necesario que el profesional se mantenga actualizado. Un capítulo al que se dedicará la primera jornada del workshop.
Oncólogos, patólogos moleculares, genetistas, biólogos e investigadores básicos, entre otras especialidades, “deberán conocer muy bien qué pueden esperar de cada técnica, cuál es su rendimiento específico” para ver qué le pueden ofrecer a cada paciente en cada patología oncológica. Con un único objetivo: “que un paciente con una diana específica, un gen alterado que dirige ese tumor, reciba un tratamiento frente a ese gen concreto”. De este modo, el especialista evitará administrar, por defecto, un tratamiento convencional, poco específico, como es la quimioterapia convencional con un perfil de toxicidad en ocasiones muy relevante y una baja o moderada eficacia, “en favor de una terapia potencialmente muy efectiva y poco tóxica para ese paciente”.
Nuevos tratamientos e investigaciones en curso
Un segundo apartado del curso se dedicará a los distintos tratamientos existentes aplicables al perfil molecular de los pacientes: fármacos, algunos de ellos ya de tercera generación, que pueden actuar como tratamiento dirigido frente a determinadas alteraciones. “Es necesario conocer estas nuevas opciones terapéuticas dirigidas a perfiles moleculares concretos, cuando falla la primera línea de tratamiento”, subraya el Dr. Gil Bazo. Conceptos básicos sobre la tecnología, “qué se puede esperar de cada técnica concreta, qué debo pedir, cómo debo interpretar, qué fármacos están disponibles y cuáles van a llegar en breve”, son cuestiones que debe conocer el oncólogo para orientar el tratamiento de sus pacientes en la clínica práctica.
El workshop centrará su tercer bloque de contenidos en mostrar las investigaciones y ensayos clínicos en curso para, en caso necesario, poder dirigir al paciente al centro médico que los desarrolla. También se abordará el modo de seleccionar a los pacientes para ensayos clínicos en virtud de su test genómico. Y ligado a este aspecto, la reunión científica mostrará el importante papel de la inmunoterapia “como uno de los grandes avances en el tratamiento dirigido del cáncer y su imbricación con el diagnóstico genómico”, detalla el especialista.
La última jornada desarrollará el cuarto apartado del congreso dedicado a las líneas futuras que se dibujan en este campo, relacionadas con nuevas tecnologías para detección de tumores y con las alteraciones moleculares implicadas en distintos tipos de cáncer. Entre los principales procedimientos se abordará la denominada “biopsia líquida”, técnica que permite monitorizar, de forma muy poco cruenta, la eficacia del tratamiento dirigido para un paciente concreto, y que aporta igualmente sobre el pronóstico de su enfermedad mediante un simple análisis de sangre, sin volver a obtener una biopsia del tejido tumoral.