"El CIMA no son los muros, sino sus trabajadores con su labor diaria"

El arzobispo de Pamplona, Mons. Fernando Sebastián, impartió la bendición del nuevo centro de investigación biomédica de la Universidad de Navarra

El arzobispo de Pamplona, Mons. Fernando Sebastián, impartió la bendición del nuevo centro de investigación biomédica de la Universidad de Navarra
Durante el acto, Mons. Fernando Sebastián animó a los trabajadores del CIMA a que glorifiquen a Dios a través de la ciencia.

September 27, 2004

El arzobispo de Pamplona y obispo de Tudela, Mons. Fernando Sebastián, bendijo el Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) de la Universidad de Navarra. Al acto asistieron el rector, José Mª Bastero, y el director general del centro, Francisco Errasti, así como autoridades académicas, miembros de la dirección de la Clínica Universitaria e investigadores y trabajadores del CIMA. El edificio será inaugurado oficialmente por los Príncipes de Asturias y de Viana. 

Durante la ceremonia, Mons. Fernando Sebastián aseguró que "el CIMA no son los muros, sino sus trabajadores con su labor diaria". Asimismo, se refirió a la identidad cristiana de la institución, señalando que "constituye un honor y una honra para la Universidad de Navarra, para la Clínica Universitaria, para Pamplona y la Iglesia en España. Aparte de la importancia y rendimiento que tenga este centro en el campo estrictamente científico y médico, tiene antes una significación religiosa y cristiana". 

En ese sentido, Mons. Fernando Sebastián animó a los trabajadores del CIMA a que a través de la ciencia glorifiquen a Dios. "Vuestro testimonio -les dijo- es una gran aportación de seriedad y verdadero conocimiento científico". 

Respeto a los postulados éticos y espíritu de servicio

Por su parte, José Mª Bastero destacó la importancia del acto de la bendición "porque en él damos gracias a Dios, le pedimos ayuda y manifestamos la impronta cristiana que tiene este centro por pertenecer a la Universidad de Navarra". También animó a que las investigaciones que se desarrollen se caractericen por "el respeto a los postulados éticos de la vida cristiana y el espíritu de servicio hacia la Clínica Universitaria y otros centros biosanitarios de la Universidad, de Navarra y España". 

Por último tuvo palabras de agradecimiento hacia Mons. álvaro del Portillo y Mons. Javier Echevarría, anterior y actual Gran Canciller de la Universidad de Navarra respectivamente, por su aportación a que el proyecto se haya consolidado. "Don álvaro del Portillo nos impulsó a plantearnos unas metas ambiciosas en la investigación y Mons. Javier Echevarría, además de seguir con gran interés la marcha del CIMA, nos ha ayudado de forma decisiva". 

También se refirió a los investigadores por "el trabajo que han llevado a cabo durante estos años en condiciones bastante ajustadas. Su tarea, de gran altura intelectual, ha hecho creíble este proyecto". Agradeció a Mons. Fernando Sebastián su presencia, "sacando tiempo inexistente de su apretada agenda", y le felicitó en nombre de la Universidad de Navarra por su próximo jubileo episcopal al cumplir los 25 años de obispo y sus años de servicio a la Iglesia. 

En su intervención, Francisco Errasti pidió a los científicos del CIMA a que realizaran "un trabajo cumplido, bien hecho y en equipo. Se trata de investigar para y por la persona enferma".