El CIMA de la Universidad de Navarra y una empresa de Nueva York se alían contra el Parkinson

El acuerdo con BrainStorm prevé utilizar células madre adultas y, si los resultados previos son positivos, comenzar los ensayos en pacientes

El Dr. José A. Obeso, director del Laboratorio de Trastornos del Movimiento del Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA)

September 6, 2006

El CIMA de la Universidad de Navarra acaba de firmar un acuerdo con BrainStorm Cell Therapeutics, empresa de Nueva York líder en investigación con células madre adultas. El objetivo de esta colaboración es desarrollar terapias efectivas contra la enfermedad de Parkinson, cuya principal característica es la pérdida de neuronas que fabrican dopamina. Si las pruebas en modelos animales ofrecen resultados satisfactorios, los ensayos clínicos (con pacientes) podrían iniciarse en Pamplona en 2007.

La dirección del proyecto corre a cargo de dos expertos: el Dr. José Obeso, investigador del CIMA y especialista de la Clínica Universitaria, con más de 20 años de experiencia en este campo; y el Dr. Eldad Melamed, jefe de Neurología del Rabin Medical Center de la Universidad de Tel Aviv (Israel).

70.000 pacientes de Parkinson en España

Según los datos de BrainStorm Cell Therapeutics, en el mundo occidental hay más de 4 millones de personas que padecen Parkinson. En España son, al menos, 70.000.Aunque el proyecto inicial se centra en el Parkinson, los promotores consideran que, si tiene éxito, podría aplicarse a otras enfermedades, como la de Huntington, esclerosis lateral amiotrófica e incluso infarto cerebral (ictus). 

La tecnología ahora disponible permite convertir células madre de la médula ósea del propio paciente en células gliales productoras de factores neurotróficos (sustancias regenerativas) y de dopamina. Hay que recordar que todas las fases de este proceso de investigación requerirán, en el mejor de los casos, varios años.

Los motivos de optar por las células madre adultas son tanto científicos como éticos. Como se sabe, a diferencia de las células madre embrionarias, existen evidencias de la efectividad terapéutica de las adultas, que no producen tumores, y obtenerlas no supone destruir el embrión.