Investigadores del CIMA identifican con precisión la fibrosis cardíaca mediante técnicas de imagen
Permitirá anticiparse a la aparición de síntomas que pueden indicar daños severos e irreversibles del corazón
12 de abril de 2018
Científicos del Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) de la Universidad de Navarra, pertenecientes al CIBERCV, han identificado mediante técnicas de imagen el modo de diagnóstico más preciso de la fibrosis cardíaca en pacientes con estenosis aórtica. Las conclusiones de este estudio, realizado en colaboración con el grupo del Dr. James Moon en el Barts Heart Centre del Bartholomew´s Hospital de Londres, se han publicado en European Heart Journal, revista oficial de la Sociedad Europea de Cardiología.
La estenosis aórtica es una enfermedad de la válvula aórtica que impide el paso normal de la sangre desde del ventrículo izquierdo al resto del cuerpo, lo que puede dar lugar a una insuficiencia cardíaca. Es una enfermedad que afecta al 5% de la población mayor de 75 años. Una vez que aparecen los síntomas, los pacientes no tratados tienen un pronóstico poco alentador, con una tasa media de supervivencia del 50% a los dos años. El reemplazo de la válvula es la principal estrategia terapéutica.
Los investigadores han caracterizado los distintos tipos de lesiones fibróticas que sufren los pacientes con estenosis aórtica y, a través de la resonancia magnética cardiaca, han identificado una combinación de biomarcadores de imagen que las identifica de manera más precisa. Según el Dr. Javier Díez, director del Programa de Enfermedades Cardiovasculares del CIMA, “se trata del estudio más completo realizado hasta el momento. Se han evaluado junto con técnicas de imagen de gran resolución en pacientes con estenosis aórtica. En colaboración con el Barts Heart Centre, hemos analizado biopsias miocárdicas de 133 pacientes tanto histológicamente como por resonancia magnética cardiaca avanzada”.
En estos pacientes, debido al mal funcionamiento de la válvula aórtica, el corazón se ve sometido a una sobrecarga de presión que favorece la acumulación de fibras que dan lugar a la fibrosis del músculo cardíaco. Todo ello contribuye al deterioro de la función cardíaca y desencadena síntomas que deterioran la calida de vida y el pronóstico de la enfermedad. “El mejor conocimiento de la fibrosis miocárdica y su diagnóstico preciso por técnicas no invasivas como la resonancia magnética cardiaca ayudará a identificar qué pacientes y en qué momento pueden beneficiarse de terapias específicas, incluyendo el reemplazamiento de la válvula dañada. De este modo, podremos anticiparnos a la aparición de síntomas que pueden indicar daños severos e irreversibles del corazón”, explica el Dr. Díez, coordinador del Programa de Biomarcadores Moleculares y de Imagen, y Medicina Cardiovascular de Precisión del CIBERCV del Instituto de Salud Carlos III.